El informe también señaló que los aumentos de luz por encima de 14 horas ayudarán a aumentar el peso del huevo, el consumo por ave y día, así como la mortalidad del lote, al asumir como habituales a los programas de iluminación constante 16 horas luz/8 horas oscuridad.
“Existen varios factores ligados a nutrición, manejo y genética que nos ayudan a manipular el tamaño del huevo. Por separado, pueden ser de utilidad incompleta, pero manejados en un programa que englobe las tres ‘disciplinas’ pueden dar resultados satisfactorios, permitiéndonos acoplar nuestra producción de huevos al mercado fluctuante en que nos movemos”, resaltó el estudio de Esifar.