El maíz se vende por encima del precio oficial, por falta del producto. La semana pasada el saco estuvo a 17,50 dólares y en esta, ya se oferta a 18 dólares. Así lo indicó a Diario EXPRESO
Las mejoras en genética, el alimento balanceado y el alojamiento han reducido drásticamente el tiempo requerido para que los pollos de engorde alcancen el peso del mercado. Sin embargo, algunas organizaciones de defensa han argumentado que las mejoras en la productividad han sido acompañadas por reducciones en el bienestar animal y la calidad de la carne, lo que ha llevado a los minoristas a considerar políticas que establecen un número mínimo de días de producción o que requieren razas de ascendencia de crecimiento más lento.
El objetivo primordial de esta investigación estadounidense fue determinar el mercado potencial y la disposición del consumidor a pagar por la pechuga de pollo con diferentes etiquetas, con un enfoque principal en las etiquetas de pollo de crecimiento lento.
Levantamiento de información
Para lo cual, se realizó una encuesta nacional a más de 2.000 consumidores de pollo en Estados Unidos. Un experimento de elección fue incluido, el cual simula compras minoristas, para comparar la demanda de pechugas de pollo de crecimiento lento por los consumidores expuestos a diferentes tipos de información y quiénes tomaron decisiones en presencia o ausencia de marcas.
La disposición a pagar por el pollo de crecimiento lento, y la importancia del atributo en la elección del consumidor, son sensibles a la información proporcionada y, en general, tienen menor importancia que otras etiquetas, exceptuando cuando a los consumidores se les proporciona información sobre crecimiento lento.
Segmentos de mercado
Hay múltiples segmentos de mercado que consisten en consumidores con distintas preferencias por los atributos de la pechuga de pollo. Dependiendo de la atención en cuestión, entre 30% y 40% de los consumidores son insensibles a los cambios de precios.
Por ejemplo, se presentó una elección por pares entre un pollo de crecimiento lento a un precio de US$0,72/lb superior (con un costo extra estimado) y una pechuga de pollo sin etiquetar. El resultado proyectado, es que el pollo de crecimiento lento sea elegido por 37%, 48% y 35% de los encuestados en condiciones: sin información agregada, pro-crecimiento lento y anti-crecimiento lento, respectivamente
Niveles de conocimiento del pollo de engorde
Los resultados indican bajos niveles de conocimiento sobre la producción de pollos de engorde en general y el pollo de crecimiento lento en particular. Solo alrededor del 3% de los encuestados sabían correctamente que la producción de pollos de engorde no tiene jaulas, y casi el 90% de los encuestados cree que más del 20% de los pollos de engorde reciben hormonas de crecimiento adicionales. Solo el 1,2% de los encuestados informaron haber comprado previamente pollos de crecimiento lento, y solo el 12% dijo que tenían conocimiento de pollos de crecimiento lento.
Creencias del consumidor
Debido al desconocimiento de los consumidores sobre los pollos de crecimiento lento, es probable que se necesite un esfuerzo de mercadeo sustancial para que el atributo se convierta en un determinante importante de la elección del consumidor.
Dada a la falta de conocimiento de los consumidores sobre la producción de pollos de engorde, simplemente informarles a ellos sobre las prácticas existentes (por ejemplo, sin jaulas y sin hormonas agregadas) podría ser una manera más rentable de aumentar la demanda de pollos.
Dicho esto, es posible que la presencia de etiquetas indicando la ausencia de hormonas pueda exacerbar el problema de la desinformación al sugerir indirectamente que hay algunas marcas de pollos que usan hormonas de crecimiento.
Si bien las etiquetas orgánicas se asocian con creencias positivas y éstas son valoradas relativamente por los consumidores, la producción orgánica conlleva costos significativamente más altos en comparación con las afirmaciones de no OGM o sin antibióticos.
¿Cuál será el factor preponderante en el aumento en el consumo?
Quizás el factor más importante que explica el aumento en el consumo de pollo en las últimas décadas es el precio. Los aumentos en la eficiencia de la producción han reducido los precios del pollo en relación con el precio de la carne de vacuno y porcina.
Tal vez no sea sorprendente entonces, este estudio también muestra que el precio es un determinante importante de la elección para los consumidores. No obstante, hay una minoría no trivial de consumidores que está relativamente poco preocupado por los precios de los pollos, y estos consumidores son el mercado objetivo para el etiquetado propuesto en este estudio.