Son una comprobada fuente de Omega 3 y Omega 6, esenciales para el crecimiento de los niños y para reforzar los sistemas inmunológico, nervioso, cardiovascular y reproductivo.
Contiene todos los aminoácidos que requiere el cuerpo para su correcto funcionamiento y está repleto de calcio y fósforo, esenciales para la formación de los huesos en los niños, pero también para reforzar las estructuras óseas en los adultos.
Con vitaminas A y D, el queso ayuda a mejorar los problemas de la visión y también a reforzar, en conjunto con el par de Omegas que contiene, al sistema inmunológico.
Así que ingerir queso a diario, una acción tan sencilla, es vital para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo. Incorpóralo a tu dieta y empieza a disfrutar de las bondades de este delicioso alimento.